El Valle de Nuria (Vall de Núria) es un precioso valle rodeado de montañas de más de 2.000 metros de altura en los Pirineos de Girona. Se puede llegar caminando por varios senderos o bien con el tren cremallera que sale de la estación de Ribes de Freser.
Hay más de 150 km de caminos señalizados con gran variedad de flora y fauna y un entorno natural incomparable. Ideal para todas las actividades relacionadas con el senderismo.
En el Valle de Nuria encontramos el Santuario de Nuria y una estación de esquí alpino de más de 7 km con 11 pistas. También un lago en el fondo del valle en el que se puede navegar con barcas de remos de alquiler y que en pleno invierno se puede practicar patinaje cuando se hiela.
En invierno tiene la belleza de las pistas de esquí, el hielo en el lago y las montañas blancas que lo rodean. Al final de la primavera, en verano y en otoño tiene la belleza de poder visitarlo caminando por los senderos y disfrutando de la belleza de las montañas.
Yo subo caminando cada año al Valle de Nuria desde la estación de Queralbs. Esta población está situada al norte de Ribes de Freser y tiene una situación muy privilegiada al encontrarse en el camino entre Ribes y el Valle de Nuria. Además está rodeada de pastos y una gran parte de su economía es basa en la ganadería con rebaños de vacas y ovejas. En la actualidad tiene mucha importancia el turismo.
La subida es de unas 3 horas caminando por un sendero señalizado. Si bien nuestro grupo siempre hace el camino de subida y la bajada con tren hasta Queralbs, muchas personas han subido con el tren de Ribes a Nuria y después bajan caminando por el mismo sendero que nosotros subimos.
Al principio se encuentran muchas piedras en el sendero con una preciosa vista de la población de Queralbs, pero después de caminar alrededor de una hora se empieza a encontrar el río y a partir de aquí las preciosas cascadas de entre las rocas, el serpenteante camino y la bonita flora. Es aconsejable subir la segunda mitad del mes de Junio para disfrutar de las azaleas con flor que se encuentran en gran cantidad.
En todo el sendero se disfruta del paisaje, de la pureza del aire, del agua, de las cascadas que incluso te salpican, de las flores, pero cuando te quedas maravillado es cuando llegas al final del sendero, después de una fuerte subida y frente a ti está el precioso Valle, con el Santuario, el lago y las altas montañas a su alrededor. Sólo llegar te encuentras un mirador. Vale la pena subir las escaleras y disfrutar de la vista desde este mirador ya que se divisa perfectamente todo el precioso valle.
Si hace sol a disfrutarlo en la hierba, al lado del lago, subiendo una de las montañas de más de 2.800 metros como el Puigmal o bien visitando el Santuario. Si hace frio dispones de estancias a cubierto con bar, restaurante, hotel, tiendas, zona de picnic o bien esquiando y disfrutando de la nieve.
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